jueves, 30 de diciembre de 2010

Record de golpes

El recorte es un efecto de las tijeras. Cuando se quiere que la hoja se parta lo menos en narrar como se parte. Si recor-por la -tad/ blanco de ho-al ritmo del-ja/. Quien firma es el que acaba de llegar. En la cabeza hay de dos, pero la simetría varia. Un boxeador que suelte el brazo y con un gancho que ves de izquierda a derecha, los guantes rojos recién comprados, las vendas/ la momia es una costumbre para desempolvar el cuerpo. La extensión decrece presión-la fuerza, ese va de zurda. Cuanto puede un chino de temporadas post-neolíticas [cuanto puede cuando está armado]. Pero fragmentar, decirlo a las garras. Dénme los sólidos y los haré pedazos. Su rodilla está rota cuando se dio cuenta que no podía caminar. Afilar corresponde al daño del alfiler. Agujetas son las botas de un soldado que pisa la cara con toda presión. Francois Truffaut pensaba que si fuera una marina sabría lo que es el mar. En lo que corresponde a la relación de los 400 golpes hice el recorte de uno por uno. K.O. porque eso era una masacre. La cara del hipotético boxeador de la cabeza en otro lado. La inconciencia de ver la hoja donde se escribe. Nostalgia de las pequeñas olas, estuve a punto de entrar/ por un momento [corte].

Danté Manzana

martes, 28 de diciembre de 2010

una razón

Logos, antes.
Ego, ahora.
Luego.

Danté Manzana

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Acerca de la noticia

Se puede analizar el contorno de una televisión con los ojos fijos ante el objetivo. Incertidumbre como elemento de la narración de la noticia, entre la expresión oral de los noticiarios. Bien se podría pensar "la verdad está en los hechos". A veces basta una sentencia en red sociovirtual o red, para poder darle el rojo vivo a la vida. No se puede hacer que el caso particular se repita, quizá por ello viene el personaje. Quizá, por eso mismo, viene la tragedia del asesinado, del desprotegido. El juego de la pirinola no tiene más azar que la lotería. Los periodistas a veces tienen que vivir detrás de un lente. Comerciales. Sentarse como hombre normal y cafeínomano, procede a ponerse los lentes. Crónica incluye secuencias de imágenes, en la cabeza de alguien que ordena el tiempo. Diciembre es el mes de los muertos y los autos. De meses con D. La gente es tan de-mente que se quita la vida: Bang Bang!. 1 minuto de silencio para ellos. 2 semanas y vienen las vacaciones. 1, 2, 3 por ti. Esconderse. Juegos invernales equivalen a nieve-el desplazamiento se atonta: confrontar con los pingüinos. Un hombre en su colchón duda: "esas son mentiras". Comercial equivale a reducir, no se puede pagar todo el dinero del mundo, aunque sea cosa del infomercial, se alarga. Sobre las noticias, lo cualquiera, dudo que esto sea aquello, dudo que el conductor tenga membresia para "tal lado". En lugar de eso, podríamos pasar las vacaciones jugando en la arena. Desgraciadamente está una nueva complicación, una cualquiera: se saturan las redes, la información, los regalos, el autoasesino-suicida-desgraciadoaguafiestas. Toma todo, la pirinola. Sobre las noticias, siempre está la probabilidad de salir en primera plana, a la mitad después de ser anunciado en el avance. El éxito de la t.v. en ese sentido es reflejo de la conciencia de proyectarse personaje, de la consideración de la localidad en que la familia muere. Y eso sea impreso.

Danté Manzana

martes, 23 de noviembre de 2010

Publicación oral

Publicar, la broma de hacerse varios. El pulir el borrador el darse el aplauso, la mano trabaja la tuya dice, publicar señala. Alterar, haz dicho que no respiras cuando lees, mínimo no echar el aire por la nariz. De vez en cuando se cierra el cuaderno sin quedarse callado, aliento es lo que les falta a muchos cuando dicen que están produciendo el sonido entero de los fonemas de la primera oración que sale con un conjunto de coordinaciones o subordinaciones que la hacen extensa como el agua digo ese cristal sale y entra de la garganta abre la boca y ahora, el latido se/para. Los segmentos entonces se dicen, y sin frente alguno viene la evaluación: el me parece divertido el lo quiero borrarte, borrarte, la insinuación de voy a reducir algo que manifiesta errores a cada intención, la vez misma de escribir con la derecha todos y cada uno de los pies de página. Ellos decían mientras leían pensaban y sobre ese respecto. Prefieren el publicado ante el publicarse, sencilla posición de la melodía de mi voz emitiendo. Ríen.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

domingo, 7 de noviembre de 2010

Un recuerdo típico

Recurrir a la memoria es ponerse los pies bien hechos para la cabeza. El topos, un tópico, pasas a ser la forma de la manifestación de la piesifestación. No hay festejo alguno, en eso que es lo borrable. Hay siempre una inversión, no hay un aparente que no pueda aparecer en la memoria, pero no hay memoria que no sé manifieste. Sería hacer fragmentos pequeños, según sea el caso. No hay posibilidad de una secuencia hay dentro. Volviendo con la fiesta, la cosa es encaminarla a una yuxtaposición de demás cosas. Hay uno que dirá que es un uso de conciencia.
El recuerdo recorre la memoria, no es una reminiscencia. Citando al topos donde uno asiste en tanto que viajero, hay siempre se contienen los recuerditos. Acaso el recuerdo típico sería la memoria de un lugar contenida en una cosa que da cuenta de la cultura. Además lo que se olvida comúnmente se respalda con las fotos. Otra vez un giro, la foto es utilidad de, en caso del viajero recordador, es cosa recordatoria. Y, a pesar de ello, el ver una foto trae consigo la nostalgia de un "nunca olvide". Es probable que sea una trampa, conciencia y memoria se toman igualitas, en ocasiones. A son de pasos, el hombre puede pagar un recuerdo típico, puede ser comestible incluso; puede no llevar cámara. Puede morderse el hombre mismo. No olvide que siempre le aplaudieron su buena memoria en clase de historia. Entonces, tiene presente el algo. Se pregunta si paso matemáticas de noche, se pregunta por los números. Yo no le puedo dar solución mientras no sé acuerde de mí, y adquiera el "recuerdito".

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

miércoles, 3 de noviembre de 2010

5 poesías animalísticas

Insectizante
Zoo-endo. Conocer a centro
a raíz, y casi sin laterales
recordar como esqueleto
los huesitos tiesos/ depurar
alguna sintaxis
me dicen parir cagar.
a los animal- es
Yo
exo-esqueleto me entro
sindicato y praxis
instinto y sesos, memoria y mar.
Mamíferizante
Mar y me/moria
las venas el agua roja
rio de reir, así sea provocar
la talla pequeñita
¡Una mujer se sonroja!
¿Pelos de zanahoria?
paso algo, paso azar
se espera que no sea niñita
latiendo o escribir prefiero
al oído: nos vamos a casar.
Felinízante
Cazarnos, en un
la taza envasa, peor testigo
o la mano o leer café
yo me resisto, digo
amanezco insedentario
en territorio de/ ¡león ruje!
un devengo, un pleno ropa de armario
le niego mis arrugas
la osteorporosí's mi rodilla cruje
¡Mis canas! ave-gentado.
Aveízante
Alas y sentado
"bípedo sin plumas"
el Occidente
también me pongo ha/scerlo
abro el pico, parte de cuerpo
parte de afuera
halagarganta, peludo
si hay un sentido: la boca
pajarojitos, no se vuelva tuerto.
Hacerse el muertito
Zaragoza ha muerto
localidad, otro/ pasas
que sus manos ya parecían
ya trazos con manchas
ya llora una pelicalabaza
ya lo relatan
unos personajes entristecían
sí hay quién mire el cielo
la intensidad perma-nace
y se abre el instante de algo
la memoria encuerpiza
las conciencias lo sabían
Zaragoza y tantos más.
Espinosa Zaragoza Mario Alberto

martes, 2 de noviembre de 2010

Calaverita 3

Y las buenas muertes han muerto
Hay un blanco: en todos los cuerpos
siempre aparece al exterior
la flaca, todos sus huesos
vestida, disímulo panteón de flor
la sonrisa folklore me muero
si que el cuerpo se/para
ni con sangre, ni en cueros
frente un cara a cara
se ve, y reta con revelar sus ojos
así del mal nos quítemos los piojos
adiós, se despide de mano
desde las pequitas al cabello cano
figura sin reloj alguno
abraza calaverita uno a uno
toda cosa de hacerte un día
toda cosa de hacerte un día.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

lunes, 1 de noviembre de 2010

Calaverita 2

Y los buenos actores han muerto
El blanco y negro se hace
en el sombrero, luce
en el traje envase
del bigote a la boca, el cruce
a las palabras al mudo
escucha de la expresión
un genio bien concienzudo
los pasos apoyados en su bastón.

Así la catrina, se arregla
la gala, de su sonrisa y cejas
se ve bien el catrín, no espera
Sorpresa de todas décadas.
Al arte, novedad: viveza
al cine, un último guión
escribes filmeza
diriges una buena muerte
donde la misma actúa
los colores de tu creación.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

domingo, 31 de octubre de 2010

Calaverita 1

Y los buenos bailarines han muerto
Bajo una taza el chango
de café, de azúcar, de sabor
endulza pa' changa
no muy de selva/ inédito horror
la calaca zangana
se viste a gala a la noche
bailaba un tango.
Espinosa Zaragoza Mario Alberto

martes, 19 de octubre de 2010

No cabe la menor duda

Dícese de las bocas cartesianistas, dícese de los seguros de sí mismos.
De los sujetos que ya se dieron cuenta que son.

-zm-

Programar la intuición de la ira.

El exoesqueleto, la posibilidad de la defensa corporal. Tavares se arranca los pelos, entonces lo observan ojos desde la derecha. La oportunidad de la defensa corporativa, casi de manos de burocracia. Se comunica la noticia, se periodiza la posibilidad de hacer la guerra. Dos tres siglos de distancia, o de inmediato el paraguas que no sirve para cubrirse de algo que explota. Primero que nada se tiene que diseñar algo para no fragmentar el cuerpo. La armadura, cubre dentro de aleación metálica, fuerte a la madera del hueso. Una bala que toca la punta del arma, el perdedor dura años pensando en la derrota. No hay necesidad de decir que no se tiene alas, porque los planeadores aparecieron con antelación de la perdida del cielo. Siempre se sigue que los aplausos y los cánticos van para el jefe. Tavares marcha bien, marchan bien las hormigas. Dúctiles, un rizoma instalado en la profundidad del primer paso del guerrero. Es cosa diminuta, ver al insecto, con la lupa que parte y estorba la descripción preliminar del ojo. Una organización de-sedentarismo-descendiente-asciende-organigrama, la parte en que la necesidad hace línea perpendicular con la especificidad. Tavares hace del techo lo más próximo, hace del cabello la exo-explosión del endo-carburador. El cerebro que reviste la sinapsis, pero una sinapsis de aquéllas. El primer fotomontaje, al ver la cara, el gesto: un ejército protegiendo su primer bandera. Ahora simboliza también, ahora se queda calvo, ahora la memoria viene con etiqueta de contingente. En definitiva la intensidad crece, nunca pudo estar visto rabioso como perro. Tavares-es como avatar-es.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

jueves, 14 de octubre de 2010

Al aman-era del abrazo

A personas que bien identifico, a su lectura, a su persona, a usted también

Cierto es que la adivinanza siempre empieza enunciando las semejanzas. Excluirse de un significado a otro, o por si la coincidencia. Lo que consiste vida, cuantitativamente, es segmentar, hacer época. El añucho, el añito, el añote, el añal, resulta que el año tiene sus respectivas similitudes con sus despectivos. Todo eso que surge que lo hace ser menos o más, ó lo citua en el tiempo. También es verdad que más cabe el festejo a la llegada de un 14 de Octubre, que de un 1 de Enero. Cierto calendario dice, que la Tierra lleva cuenta de tantos años. Entonces se desplaza la línea a una localidad, al cuerpo establece la brevedad de años. Dar a luz, y eso que cuesta trabajo temerle a la oscuridad. Jugando con los miedos, con eso que asemeja la sombra con el monstruo. No hay mucho admirador de las adivinanzas, lo descubierto mediante otros métodos. Aunque sí, hay ciertos días en que las edades coinciden, en que los lazos se tantean uno perpendicularizando el diagrama. Aún quedan algunos años para buscar alcanzar al más viejo, aunque esa pausa que uno busque vaya más allá de unas cuantas canas, que todavía no tengo. Qué sin bigote como mal mexicano. Ni en verdad usará sombrero. Antes de saber contar, uno cumple el primer año, antes de saber reproducirse, uno recibe el flashazo que lo acredita como machito. Después viene el recuerdo que rara vez olvidamos, a los buenos días. Ahí también la luz. El organismo converge en un punto de no ganar ni perder fuerza. Esa edad, un punto no hallado. Pero poco menos de lo que imagino saber contar infinitos puedo pronunciarme. Pasar por la boca palabras mágicas, de-vital-exceso. Hacía la boca de otro proyecta: la suerte de un nuevo diseño arquitectónico de la cara; arquetipo de la primera pareja. Porque uno también se fragmenta en varios grupos. Mi identidad, mis años, ese poquito de tiempo que descubre que ya soy grande y tengo la vitalidad de la lechuga, entre otras cosas. Cerrando el juego ¿En qué se parece el abrazo al aniversario? Al abrazo le sobran motivos de bienvenida, el aniversario bien es venida de todos ellos. Anexo, de fondo, el aprecio es cosa de dos.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

miércoles, 6 de octubre de 2010

Localizarse especie

La clasificación es una exclusión. Especie a las cualidades, signos con prontitud revelan. Los movimientos y el nómada; aislasionismo el animal se agrupa. Territorio sin figura geométrica, extensión creciente. Hacer estructura: el estrato, los estratitos y la asignación. Dividir puede ser derivar, hasta hacer unión en un sector: ahí hay convergencia. Puntos, la estructura no es un cuadro partido a la mitad, ni un círculo molde. El asesino, el caníbal y la protección: reducción todo esto, para sí. Hasta ciertas familias de monos toman alcohol. El mamífero como primera condición del nacimiento. Convertirse, vestigiarse por dentro. Cambian los órdenes segundos más, segundos menos. A través de las exclusiones de la figuración de un actor. Historicidad es memoria, colectivizar la memoria, hacer lenguaje. Gritar resuena la conciencia, la generación de infraestructura natural. Civilización, implante del desierto único. Apareció la clase, un fantasma nómada a pasos de viaje. Hallar la figura no es permitirse conocer un área mediante axiomas. Sedentarismo, de aquello aluden cultura. Estaba yo y el otro estrato. Soy yo, y la memoria vertiginosa, acelera tiempo. La agenciación, luego bien, la protesta: converge golpe reagrupa niega la identidad de los modelos.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

lunes, 4 de octubre de 2010

Natural exoadentros

Pensaba en los órganos de una planta
pala asesina no así la sepultura
un tallo largo símil a una cuerda
a los juegos de las mitades y de los finales hermosos
pensarse el contenido en pétalos color en valor
de color amarillo
formación imposible la escritura vertical
la raíz en caligramas. Hasta que la escritura se hace líneas transparentes
reparte como mis pies pasos al piso
largo verdoso hacer plan de semilla
de dos en tres en números que no coinciden
Aplanar es tener conciencia de que mi jardín es un espacio
localidad de agua al brillo reflejar unidad que he visto
las venas en la hoja para respirar
pues sería para otra cosa que en primero hice de los segundos
instrumento dureza y primer reblandecimiento de una rama
decolorización a lo que lo negro no está
pensaré en los órganos de un animal
contenidos en un cuerpo hay su localidad la tierra
del fósil y el ensayo esquema extensión arriba
a vistas a oídos a olfato.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

domingo, 3 de octubre de 2010

Primera propiedad del agua

A las menos producciones, a los menos mapas,
a los recuerdos pegados al lado derecho
a las manos flojas, pausadas y horrorosas
a los dos que a veces es simple acecho de acabar la pluma
el teclado, hablar de espuma:
muy bien debajo de ella, habrá la disyuntiva.
a lo que sí o lo que no. Y también me condiciono:
de tal manera llego, aguamarina
Si yo fuera pulpo produciría dobles más cosas,
a granel estamparía escritos.
quizá por el exceso de tinta, a por debajo de su medio centro.
sería/ que los tentáculos casi gruesos y pegajosos,
casi de miedo por ser exhibidos allá sobre el hielo
de un supermercado.
Sí, la vida marina presenta más colores
en ciertas localidades.
La tinta, última succión de lo borroso
de lo no claro, de la producción de textos marinados.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

martes, 28 de septiembre de 2010

Hablar

La unión de las uniones, no será dibujada a calca del cosmos. La unión/ el complejo, los objetos que valen no por ser unidad-algo sino algo-unión. Los enlaces también son imperceptibles. Aquello se forma contrario al caos, sobre ningún plano: designa un estado en sí mismo. Sin embargo, no construir, no destruir, no destrozar, no constructivizar: los ando's y endo's que aparecen por excelencia; construyendo el gerundio. De que se dice, que de se dice el queísmo, dedeo para deístarme. Para no andar destruyendo, no declares la posibilidad última de los dos sentidos. ¿Afirmas tú ó niego yo?. De los sentidos partiendo, lo que antes se declaraba: la atribución, el estár único. A, E, I, O, U, haciéndose blandas entre los duros dientes, palabra emblandeciendo como fonema, los endos finales, la utilidad de hablar de muerte y señalar el cuerpo por delante. No decir plbr, siquiera n plbr. La lengua presionada por última vez, des-gracia de los conocidos, signos por sí que parecen signos, que devastan y prolongan el teatro detrás: porque uno dice significado, y verboidiza hasta. En primeras el niño i los otros, en últimas los otros y el niño. Zaragoza destruye el lenguaje, ni niego que no afirmo. Ni digo que español no pausa en la cúspide de sus vocales, en ese cosmos detrás del señalamiento del segundo dedo a una partícula caos. Ramificando también es crear sin afirmar ando, sin señalar tiempo si.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

lunes, 27 de septiembre de 2010

Circulando a bici

La trayectoria de una bicicleta se escribe, se lanza, forma líneas de reparto a partir del control de un moderador; antes nisiquiera se hablaba de objetos voladores o la carta. Antes sólo llevaba el pan de cada día. Para aumentar su vanidad, se diseñaron por montones: tamaños, colores y estilos. Ha llegado a los sujetos más extremos, a los más competitivos y a los más inocentes.

Sin movimiento, puesto que se aprisiona en la sala. Luego, avanza por todos los rincones posibles. Si eres joven: úsala y se hace el mandado; regresa un poco el tiempo: es un valor de diversión y exploración. Puedes correr al futuro frente a tu hijo, tú vas empujando desde su espalda, él sobre ella. Ambos manejan sobre 4 ruedas.

Desde que un hombre ocioso e ingenioso inventó la rueda, se sabía que después de muchos siglos ensamblaría en un aparatejo perfecto o un transporte elegante, si se prefiere. En sus calles, su uso peligroso, de la acera a la otra. Aunque observar los círculos atiborrados de mediatrices girando, siempre será un placer.

¡De prisa!; suban a sus biclas, que van a empezar "las carreritas". Los que no dominamos el manubrio para dar vueltas, recorreremos zigzageando en línea recta. Evitando la caída.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

viernes, 17 de septiembre de 2010

Piscina

A Pablo [Confabulario]-Juan José Arreola

Pez grande se come al chico
y entre otras cosas
el chico se come a otro
a un cualquiera
que no sea como un ensayo de su genealogía
mientras sea un canibal de herencia
Pez grande se come al chico
como paradoja que el chico
no puede hacer comiendo
y desde afuera, con palomitas
Pablo lo observa todo.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

Desolación, de-solación, de oración

Puede estár fuera de primavera una flor. Tan improbable se vuelve que hallemos dentro de la flor una estación entera. El brillo del mundo, a veces se reduce a una gota de sudor. Cuando suda la bebida anuncia: le incómoda el instante a/gota. O fractal/sol a fechas de todas fechas. Un poeta se puede volver sentencioso. Narrar todo con sentido hace la línea: poeta-juez son uno. El juicio casi siempre finaliza el enunciado. El jardín también puede ser el suspiro, Faustine. Unos lentes de Sol nos dicen que no existe: los ojos-luz-sol desaparece. El sentido tampoco está; pero se puede esclarecer en la cara de un niño sin juguete. El viento se diferencia: los labios de alguien ó el veintilador, sino vayan en dirección idéntica. Se puede oler una flor, una por una, sus tallos juntos: en primavera como burro al juicio de un zoopoeta ó la erotización de la voz-viento al oído de alguna oreja.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

martes, 14 de septiembre de 2010

Borrador

Cayó un relámpago como estallido
sobre el borrador que salía de la hoja
temé incluso el lobo
de la tinta del lápiz que escapa al otro cuerpo
es de noche: suena el aullido.

El caracol anhela crecer su cuello
cual de jirafa espiral a su concha
y la tinta presiona manchas.

Entonces el borrador protesta
y borra
y borra y borra
que ni el sonido suene
lo que la mosca manifiesta
una a una las palabras resbalen
y borra y borra
así la expresión zigzag
del estruendoso relámpago tinta de luz
que al cielo pinta otra mancha/ fatal.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

sábado, 4 de septiembre de 2010

Lluvia-Araña-Voz.

Expresiones de urbanidad al sufrir el diminutivo: los cánticos: un probable acercamiento a las intuiciones del pasado. El niño se vuelve a cantar con melodía, el escucha interpreta como un simple canto popular; desde el grupo: una petición, sin embargo, un descubrimiento de la escena, de la representación de la miseria arácnida.

Huitzi, Huitzi, araña, eso que puede evocarse a una actividad itinerante de una persona de edad media. La expresión asombrosa del lenguaje somático, volcada la alegría incluso hasta lo más profundo de la sonrisa del niño, luego sus manos y sólo así la contemplación de un acto sin contradicción de épocas: porque la telaraña debe caer, la araña no es esa cosa, a pesar de que es el radical de la yuxtaposición; puesto que su figura se marchita, es decir, cae con las gotas.

Los rituales: las danzas y otras expresiones artísticas que plagaban las eras prehispánicas señalan una semejanza entre la lluvia y sus pasos, de forma análoga. El anciano siempre luce contemplativo, a pesar de que el hombre tenga una esperanza de vida al nacer desfigurada con el paso de los siglos. La llegada de los españoles trae consigo la educación asignada como institución esencial; de lo anglo nos hemos llenado de kinders, además, de otras cosas. Diremos que se discute el salto de los pies a la garganta, ese puente azul que lleva la mercancía dentro de barcos, cómo un delirio de Verne. Ahora todo el occidente se presenta en las ansías de un niño, que analiza la ventana: lo que ahí fuera de ella; luego entonces, sale el sol, se seca la lluvia. Se sabe que sus manos jugaron con tierra, vibraron nerviosas al aire y señalaron sin pudor alguno: el primer sustantivo, luego el verbo: valoración de fenómeno y objeto.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

viernes, 27 de agosto de 2010

Quinto piso/ intertexto de Primeras luces de la fotografía

Suponte que a los conitos de papel les caben unos cubitos

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

martes, 17 de agosto de 2010

Bienes plásticos númericos

La asociación de 2 palmas, provoca
a 1 hombre ausente de agenciar ideas
al terminar, ahora 2 brazos
1 abrazo: su bienvenida
su conversación conduce 2 lazos
resulta 1 conclusión maniquea
burdo puede ser el encuentro de 2 admirables
tras el discurso de los pasos vueltos números
para hacer una serie de 1 apretón de manos.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

lunes, 16 de agosto de 2010

Grabar mediodías

Si un verde alrededor/ si un blanco
y negro de película/ o los efectos grandiosos
de colosal nivel/ el escenario donde se comportan
hasta los ojos del perro observan
a qué aparezcan, a qué aparezcan
las posturas de gansos nuevas/ el arte animal
si existe ensambla al rompe/cabezas de clavos
de las abejas, y la pausa a una imagen congelada/
mismo efecto: tú reminiscencia
se hablará en idioma del pájaro o la discusión aquella
de los leones/ del mosquito que pica como la abeja
así la sangre corre/ sobre otra pausa a los ojos dormir
les toca/ y no entremos al sueño, de maneras
un método caerá del cielo/ en qué los árboles chocan
y después de tanto/ donde el perro ladra
en ese lugar/ jugar la traducción de verás
como el pelo baja por tu espina/ alrededor el verde
y una sonrisa por lo qué estás pensando
ahora que luego haremos/ aquí tampoco.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

lunes, 2 de agosto de 2010

¿Qué hace usted cuándo no lee?

Cumplir una posibilidad de acciones ajenas a la lectura.

Dejar de ver letras. El abecedario qué no existe.

Desarrollar la incapacidad del alfabetismo.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

Confesión obstruida

¿Por qué tienes una manía hacía tantas vanidades?

Necesito tomar en cuenta el concepto de lo útil, evita engrandecerte con un sermón rebuscado, evítalo.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

En el bolsillo de Salvador

Hallaste unas monedas, de sólo dos caras. Redonditas, sin ninguna imperfección, súponte qué están algo sucias. Restaba gastarselas. Comprar los bienes de un nuevo pantalón, o hacer juegos de azar: echar los volados, o dejarlas reposar bajo tierra para que nadie las hallase. Tocamos ese tema algunos días y nuestra conversación se volvía cada vez más grosera. Nos hicimos viejos, del cielo tenía que llegar una idea: a nuestras inocentes cabezas enormes, a nuestras manos de grandes, a nuestras bobadas de niños. Faltaba eso, pobre cálculo que muchos no saben hacer. Me explico; dejamos las monedas en el sótano de nuestras bocas. Compramos chicles. El lector no se confunde, hablabamos de las mismas monedas, una explicación de un pasatiempo. Ningún transfondo, súponte que después de muchos años no me gusten los chicles, a la otra cara de la moneda: ¿Preguntarle a Chava?.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

viernes, 30 de julio de 2010

Pasas de noche

Se adelanta al paso el pie izquierdo, si hay un cuerpo ó silueta en la acera de enfrente.
Hablo de los dos posibles escenarios: noche ó día.
Entonces se explica qué a ciertas horas del día hay tráfico, embotellarse.
Caminan por las calles inseguras las personas, el alumbrado toca el asfalto con la luz.
Sin embargo, no te importa a ti la inseguridad. Ahí, del otro lado.
Esa persona que espera paciente, siendo una figura/ "aunque no cuida le línea".
Cruzar, y entonces a esa silueta se añade la cartografía/ escenografía.
El público al segundo acto aplaude con sus manos, porque el primero fue maravilloso.
Porque el segundo será más intenso y fascinante.
De día, sus gestos dibujan la obra, ó el baile decora la escena.
¿Por qué la gallina cruzó la calle?
Alguien con el folio 291, admira su boleto. Los ojos se cansan de tanto signo.
¿Y quién sabe de qué más?
Qué si venía desvelado, cansado ó estresado (la palabra favorita del siglo XXI).
Al tercer acto, las manos revelan su ensoñación.
Han elegido a un hombre para resolver la interrogante que titula la obra.
291, no es el número de la suerte. Y él no es actor.
No hay que prestar atención al cruce de dos sujetos que se creen aves.
Ni modo de practicar de otras maneras, ni modo de no interactuar con los otros.
Después de todo es de noche, y su pareja le dice:
Responde, nada malo te puede pasar.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

sábado, 10 de julio de 2010

El Zanate (intertextos: El buitre- Kafka y El cuervo- Poe)

Eráse un zanate que me picaba los ojos. Mis lentes se habían roto, y al vivo mis ojos, al viento del pico del ave nada más.
Yo sentado con los pies descalzos y los ojos sobre la ventana, los portazos que rompen el silencio a la llegada de un ave que vendrá mañana. El sonido estruendoso que se acerca de atrás, de fuera de mi habitación tranquila, ruido de familia y nada más.
Habrían de cambiar los llantos de allá afuera, cuando el viento inquietará mi estancia. ¡Oh! no, que mi idea del cuervo no muera, invada a "un" la lucidez fantástica: Jamás.
Los lentes oscuros evitaron el acecho, del miedo al buitre que se haría provecho: con mis pies, pies tendidos al suelo, guías de su circular vuelo: que en mi boca no sería más.
Demonio en su mirada, lo hacía antiprofeta de hombres que vomitan el alma tras provocar arcadas, sus alas ondeaban inquietas: la serenidad que a ellos no llegaría jamás.
Negado al deseo de preguntarle su nombre, me admire de su profunda compañía: venidera de la inmundicia humana, permanente hasta el amanecer del día. Su aroma conllevó a la abrupta distracción, alejando mis oídos de flujos sonoros, haciendo así a la nariz en acción. A la noche mis ojos, ¡Para siempre jamás!.
Sin consejo de nadie, el zanate consumió mis ojos, llorosos de sangre, ríos rojos. Esperando mi inmóvil figura, un buitre evocando a la tristura. El cuervo así, permanecía contemplando mi dolor desde dentro. De nombre Jamás.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

Intensidad de tus botas

Sostenida la ocasión por la trenza del recuerdo en que te escribo
habré de recibir el comentario de un lejano vivo.
Adicción por la pesadez, que en caminatas se volvía calor
cálidez de mujer, luego esos verbos desaparecidos,
basta sólo respirar por momentos en que él otro habla.
Hacerse a la escucha, reafirmar el encuentro de distancias recorridas
que en suma de los dos sería poca.
Detalle profundo que es hallarte en visión de la alegría,
pausa, y así el play, con la memoria que graba poco
en ausencia de cámara
a ellos les queda mirarte así, con simpleza de hoja pálida
a nadie como a mí, mirar el rosa en profundidad
de líneas que construyen tu rostro.
Siempre que me interese conocerlo
más que a mí/ más que al mío.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

viernes, 9 de julio de 2010

Innombrable Samuel Beckett

Por ahí vi a Beckett
hecho huesos huesos pobres cadáver notorio de arrugas
ahí está Beckett
abajo de las líneas del relieve visible
gusanos en eco primer amor se hizo viejo
ahí el Beckett que no espera
imaginando muerte a edades primitivas
absurdo de irlandés veinte siglos de sentido
Beckett es influjo de conciencia Samuel
Samuel Becket conciencia de influjo es
idéntico a sí mismo igual que la compañía del diferente
una mosca y qué más? ahí dentro
imagínate imaginar
un día feliz la imaginación muerta
de Beckett nada se habla sólo
eso que compone la compañía del 89
yo a tres años de ti
alcanzaré la intertextualidad del solitario
luego ahí el epitafío de 1906

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

jueves, 8 de julio de 2010

Plagio al calendario

Sobre Julio se lanzan miradas
de niños que rompen los platos, mujeres que compran zapatos
vejez con paraguas (insólito baño)
hace semanas teníamos a Mayo
correr de Tierra/ correr de luna.
y la moneda en el aire se queda cuando el nublado tapa el sol
con un dedo.
los niños ya rompen los platos, su mamá se come el caos.
mascotas en las calles, ¿las ves?
la avenida domestica animales, papás rompe huesos
violencia domestica
a Julio le faltan días para tener la nostalgía de Noviembre.
pasan Enero, Marzo, Abril, Mayo y Junio.
ha parar el reloj de arena de las escuelas
ha parar el despertador digital de mi madre
el niño gira el trompo/ así la Tierra.
Agosto:
revive los profesores muertos, tranquiliza la ciudad de hueva
fanática de vacaciones soleadas.
el timbre toca el calendario del dedo
de/es Julio. Leyendo oraciones
que ha nacido en Agosto
no mueras Febrero.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto

martes, 6 de julio de 2010

A: Ko Un

Partículas componen "efímero", hablar de codicia a los particulares, todos nos asombramos de ver tan corto el día. Superponer un dato, la igualdad de una partícula en relación con el tiempo, por segundos acaba mi día. Decir interminable, te cuento que mi monotonía deja las partículas de lado. Interesante comentario de percepción, efimero recuerdo tendré de tu dato.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto.

Un final diferente para "Poema"- Julio Cortázar

Además te quiero, y minutos antes de despertarte y si tus ojos se congelan
un café brillante diferente al frío.


(Poema 2 es conclusión perfecta del 5 y 6 que decidió no hacer con número: esa vela tendida)

Espinosa Zaragoza Mario Alberto.

Graduación de las letras anónimas

La Sociedad de Alcohólicos Anónimos reúne a cientos de sujetos x, se conocen, y luego, después de respirar el aire callejero, aparecen en la cochera de Mario Alberto. Entre perogrulladas, varias, consiguen que asienta con la cabeza. A unos de ellos les ofrezco whisky, otros se niegan al vino, hay alguno que me ha tirado un caballito de tequila. Por regla general la cerveza los obliga a dar el sí, con la sonrisa maliciosa del adicto.

Los graduados y yo, es un juego clásico del edificio de la esquina, en relación con la cochera personal. Soy el examen alcoholizado de todas las personas que recuperan su nombre al dejar el etanol. Mi risa burlesca, estruendosa y continúa les abulta los oídos, terminan con actitud del nervioso. Necesitan unos grados en alcohol.

A 4 casas tengo un centro de rehabilitación para drogadictos.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto.

Deficiencia númerica

¿Cuánto cuesta un viaje al paraíso?

Reprobé matemáticas, apenas y aprendo algo en economía. Por todo lo qué he escuchado, yo diría que vale mucho.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto.

Cierra el pico

¿Cuándo me llevarás al aviario?

Estás castigado. Te acabaste el maíz por darle de comer a las palomas, no seas descarado hablando de aves. Hoy no será, soy tan inflexible como el pico del pájaro carpintero.

Quack (se dicen los patos, al estanque de la escena).

Espinosa Zaragoza Mario Alberto.

Designación de absolutos/ tiempo

El siempre, la cuantificación de la historia y la post-historia, en razón de una reactividad que a los ojos de cualquier sujeto se plantea cómo el roce a la eternidad. El nunca, cuantificación de los mismos tiempos, se plantea contraria a la mínima actividad, la imposibilidad de los colectivos e individuos por ser una implicación en el espacio.

La generación de modelos garantiza la implicaciones de las sociedades hacia la post-historia. Olvidan los sistemas: la fracción de tiempo que queda imperceptible. La imposibilidad de certidumbres en el porvenir o devenir, según sea el caso.

Espinosa Zaragoza Mario Alberto.